xii capítulo

El Capítulo General representa auténticamente a toda la Congregación y expresa colegialmente la participación y el cuidado de todos los miembros y que … “ejerce la suprema autoridad de la Congregación, erigiéndose como autentico signo de unidad en la caridad, conforme a la norma del Derecho” Constituciones No. 130 y Derecho Canónico 631.  Es claro, queridas hermanas, que solamente a partir de una profunda apertura al Espíritu del Señor y de una sintonía plena con el carisma que nos ha sido confiado a través de la mediación de nuestra Fundadora Madre Elisa Jaramillo Botero, podremos cumplir la misión que nuestras hermanas nos han confiado, somos su voz en el presente y la prosperidad del futuro que está en manos de Dios  y en el esfuerzo de nosotras.

Vivir nuestro XII Capítulo General es abrir el corazón a la esperanza y dejar que sea el Espíritu Santo quien guie y oriente nuestro caminar. Es colocar en manos de Dios la vida de la Comunidad y el servicio al mundo guiado por la reconciliación, la fraternidad, la Palabra de Dios y el testimonio de vida. Una vida religiosa con una mirada puesta en el mundo que anhela encontrar en las Siervas de la Madre de Dios espacios de escucha, ternura, misericordia, coherencia, olor a Cristo, medicina de Dios, esperanza y alegría.

Caminar con el corazón gozoso por el encuentro como comunidad y con la mirada puesta en Jesús que nos impulsa a vibrar con pasión por la extensión de su Reino que es Justicia, Amor y Paz.

Vamos con la mirada puesta en Jesús, que es quien sostiene nuestra esperanza y nos colma de su Espíritu para caminar juntas y llevar con nuestro testimonio el mensaje del Evangelio al mundo entero.